No digas que me quieres para siempre,
Ni que mueres, que lo sientes,
Pues si un dia no apareces en tus pasos,
Ni en tus manos, ni en tus ojos- ni en tu aliento…,
Te mataré. Quemaré tus recuerdos en un cenicero,
Y secaré mis pieles al viento, en alguna playa.
Y seré sólo uno,
vagabundo con el mundo.
Otra vez.
El verdadero mundo es siempre vagabundo, Ismael. De ese verdadero mundo escribo yo siempre… aunque a veces parezca que estoy “más allá” siempre estoy “más acá”. Es la doble visión de las realidades.
Otra vez vagabundo??… ¿Acaso ya lo fuiste antes?…
Saludos Ismael
Bueno cuando te dejan te sientes vagabundo. Yo me siento así al menos, aunque a estas alturas ya soy un lobo estepario veterano jaja