INFINITO

Huimos todos hacia el infinito
Infinito finito de algo
Infinito finito de todo
infinidad de infinitos
Son mucho
Para nuestra pobre imaginación
Diluyámonos hasta el infinito
A cada segundo
Cogiendo una margarita
Y sintiendo su infinito candor

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Infinito

No quise ser Dios,
ni reconocido, ni audaz, ni héroe.
Mi único deseo es haber sido adjetivo,
llenar de calidad la fragancia de la rosa
y acariciar la fonética sonora
de un álamo en ribera.
Infinito hogar de sentimentales horas.
Hoy, leo y sueño y pienso:
aquí la línea creativa no termina.
Vorem es el Santo Grial
tantas veces escondido.

3 comentarios sobre “Infinito”

  1. Greko: ese deseo de adjetivar los sentires a través de la germinación de la fonética es algo que manejas con una excelencia de artista genial. No ser Dios es algo tan heroico que algunos lo olvidan. Hay quienes son dioses sin apenas darse cuenta porque no son capaces de crear sentimientos de fragancia sino que intentan encontrar la llave de todas las verdades en sí mismos, como Seres Superiores. Es cierto que el Santo Grial está escondido muy dentro de los parrágrafos de la Fantasía. Un abrazo cordial.

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