Yo, tierra, escondo en mi cálido seno
las semillas de las futuras plantas
y las raíces de las que ya han brotado.
Yo, árbol, me yergo en la solitaria llanura
y ofrezco al mundo el verdor de mis hojas,
que se agitan al viento cantando su canción.
Yo, oveja, nunca he dejado mi rebaño
y me librado de ser comida por el lobo,
quizá por exceso de precaución.
Tú, roca, que tan enorme pareces en la lejanía,
disimulas tu sequedad con las jaras que,
como un disfraz, crecen al pie de tu mole.
Tú, jabalí, presentas un exterior humilde,
que contrasta con tu supuesta altura de miras,
que pretende desconcertar al desconocedor.
Tú, pájaro, que sobrevuelas la roca
y no encuentras un lugar donde posarte.
Quizá añores el valle, la tierra y el árbol…
Amada tierra,amado canto a la vida..somos la naturaleza y la naturaleza está en nosotros,cuidemos nuestras raices y seremos por siempre parte de todo lo bello de esta tierra.Un abrazo poetisa
Ojalá tus últimos versos no sean nunca realidad y el pájaro encuentre el árbol donde posarse y hacer su nido.
Te ha quedado un hermoso poema. Acostumbrada a leerte tus textos me has impresionado mucho con la poesía.
Un beso amiga y feliz de volver a leerte.
En realidad, Wersemei, todos los elementos, la tierra, las raíces, hasta los animales, tienen un simbolismo para mí y eso es lo que quería reflejar en el “poema”. El pájaro no encontró donde posarse y por eso echaba de menos el valle, la tierra y el árbol. Gracias por tu comentario y muchos besos.
Gracias por tu comentario, yo también soy amante de la naturaleza, que nos da todo. Un abrazo, Lullaby
Por cierto, me doy cuenta de que en la segunda línea de la tercera estrofa me he comido un “he”, por lo que sería “me he librado”. Me excuso.
Bonito canto de esperanza natural. Sigues siendo tan profunda como siempre Carlota. Este tu hermoso poema me hace recordar aquellos tiempos tan cercanos (fueron ayer mismo) donde los dos investigábamos asuntos varios. Bien. Evolucionamos siempre Carlota. Evolucionamos y veo que has mejorado mucho como poeta. Que buen canto…
Gracias, Diesel, eres muy benigno conmigo. Te diré que yo también recuerdo aquellas investigaciones… Sigo investigando, desde luego. Ahora sobre los compositores españoles del Renacimiento, a raíz de un ciclo de conciertos en la Sala de Cámara del Auditorio. Maravillosas músicas, maravillosos compositores.
Un abrazo.