Seres a los que quisimos mucho más de lo que pensábamos y que ya se han ido de aquí… amores grandes y pequeños amores; unos de años y otros solo flor de un día pero que todos ellos dejaron influir su ánimo en nuestro sentimiento… esos amigos y amigas que vivieron mucho tiempo a nuestro lado y con los que pudimos vivir y descubrir misterios pero que ahora ya quedaron lejos, en la pretina de los recuerdos… esos compañeros y compañeras de juegos, de labores, de aventuras pasajeras pero con los que pudimos entablar algo más que una simple ausencia… esos países que tuvimos que abandonar un atardecer porque la vida empuja a destinos inextricables… esa ciudad… ese pueblo… ese otro ser humano con el que cruzábamos miradas y silencios pero que hacía pensar que eramos algo más que aire… todas esas grandes ausencias que se acumulan en los diarios diapasones del vivir. Hay muchas nuevas presencias pero… !cuántas ausencias se acumulan en el pasaporte de los viajeros!. Esas grandes ausencias dejan grandes huecos, grandes huellas, grandes pensamientos… y nos vamos haciendo lejanos… hasta que un día tenemos ganas de volver y ver a todas esas grandes ausencias reunidas en un solo sueño…