“Siempre fuiste mía
aún sin besarte
mi alma sabía
que sólo podía amarte”
En tu soledad espero encuentres
la paz y tranquilidad que anhelas,
y en tu vida soy sólo el “tres”,
espero no olvides las noches con velas.
Esas noches que descansamos
pero al amanecer nos sentíamos,
cuando el uno al otro amamos,
ser el universo siervos y amos.
Hoy me voy lejos de ti,
es prudente para tu sentir,
aunque estés sola sin mi
piensa que así podrás vivir.
Comprendo que hay otro hombre
y que no superas esta vida sin él,
te dejo sólo ésta carta sin sobre,
y que seas feliz y él no infiel.
Aún lo llamas tuyo
y eso nunca lo cambié
a pesar del tú, del yo…
hoy me voy y dirás: se fué.