Ahora que don Adolfo se nos ha ido sin memoria, resulta que al angustiado y agobiado Zapatero (como siempre con un verdadero nudo agobiante en la nuez donde se ajusta la corbatilla) ha vuelto a recordar lo de “zapatero a tus zapatos” y me han contado por aquí allado (desde Maszurrón hasta Masmarrón y a buen entendedor sobran las definiciones de Maszurrón y Masmarrón porque todos sabemos lo que significan) va a abrir una zapatería de “de luxe and fashion” feminista para que todas “ellas” (y sabemos lo que quiere decir eso de “ellas” con el bocado de Adán en la nuez, jejeje) deseen ser el príncipe encatando besando a Cenicienta. ¡Jesús que mundo! Y, además, a don Alfonso “El Guerrita de los Anteojos” le ha dado la terrible y temible ventolera de leer “Guerra yPaz” en lenguaje yiddish (que mola mucho eso de saber el lenguaje yiddish chapurreado a lo gazpacho andaluz) porque cree que don León Tostón se lo dedicó mucho antes de que don Alfonso naciese con el nombre de Monchito. Mientras tanto los pepinos amargan, la izquierda no sabe dónde está su derecha y doña Rosa amaga con un ataque en vertical para terminar en horizontal.
En definitiva, que 7 puntos le han tenido que dar a uno que ha recibido un zapatillazo en el músculo glúteo mastoideo que va a pasar a la Historia como el zapatillazo más terrible de la guera de los limones (la guerra de las naranjas son de otra Historia). Y es que Zapatero quiere entrar ya definitivamente en las Enciclopedias muy cerca de Zapatustra y con una leyenda que diga: “Así habló el zapatero cuando vendía zapatillas a granel”, que es una forma muy interesante de pasar a los Diccionarios. Resulta que, por culpa del zapatillazo al que recurren los Cronistas de la Villa, en el Ministerio de Defensa nadie sabe de lo que nos tenemos que defender los de la meseta central tirando un poco hacia abajo; o sea por Talavera de la Reina poco más o menos y, además, toda nuestra flota de aviones (incluídos los de papel que han confeccionado los alumnos y las alumnas del Sagrada Familia de Madrid) han desparecido volando de camino hacia Neptuno, a donde acudían antes de extraviarse por la Casa de Campo, para evitar desmanes de los del Atleti que sueñan con tres copas de más esta temporada pero que no recuerdan, en su éxtasis de euforia por ser los lideres del momento entre las chavalas de buen ver, que la Copa del Rey ya se les ha escapado.
En vez de leer el ABC yo quiero leer el XYZ porque me gusta leer empezando por el final sobre todo cuando se trata del As Deportivo y, además, al Real Sociedad-Real Unión (que son dos clubes con muchos dandys a los “made in britanic and mapuche” le voy a poner una X; al Cataluña Democrática-Izquierda Derechizada de la Convergencia por Cataluña y Otros Pueblos de los Alrededores de Jaca le voy a poner una y y al Pepote Club de Futebol-Club de Futebol Peporro, le voy a penar una Z. Porque resulta que como es una quiniela imaginaria me imagino que me toca y me vuelvo Midas para demostrar que llego al 1’80 que, al menos, me sirve para un café con leche más bollería fina en la cafetería de mi amgio Huan Wan Zuan.
Me informan también mis colegas invisibles llegados desde Neptuno, y huyendo de la parafernalia colchonera, que a un grupo de colegiales del Sagrada Familia (si es que la familia sigue existiendo todavía porque nadie llega a saberlo del todo a pesar de lo avanzado del Internetillo para el chiquillo) de la capital de España que me parece que sigue siendo Madrid pero algunos indican que la van a trasladar hasta Madridejos de las Altas Sierras para ponerla mas lejos y más alta, han sido castigados por jugar al a zapatilla por detrás tris tras si la ves no la verás tris tras mirad para arriba que a lo mejor caen sandías y mirad para abajo que a lo peor caen melones. Y a todo esto hay que sumar o restar o multiplicar o dividiir o incluso quebrar con números primos que el dichoso submarino de los escarabajos vestidos de luto no era un submarino sino un barco de pesca para cortar el bacalao y ya sabéis a lo que me refiero con esto del bacalao y los escarabajos vestidos de luto hasta en verano que daba agobio solamente de verlos. ¡Ay si nuestro Peral levantara la cabeza debajo de un manzano!
¿Qué pasa ahora en Crimea? Que Putin (vaya apellido tiene el angelito) se ha automarginado por 8 cuestiones; la primera es que no sabe dónde se ha metido, la segunda es que no sabe dónde se ha metido, la tercera es que no sabe dónde se ha metido, la cuarta es que no sabe dónde se ha metido, la quinta es que no sabe dónde se ha metido, la sexta es que no sabe dónde se ha metido, la séptima es que no sabe dónde se ha metido y la octava es que no sólo no sabe dónde se ha metido sino que no sabe salir de dónde se ha metido.
Total que este mundo está más averiado que el dichoso barco de pesca de bacalao de los escarabajos vestidos de luto en plena faena veraniega que ni se la saltaba Curro Romero ni Pepe Romerales y que para disimular decían que era un submarino amarillo pero que sabían de música menos que el gato de mi tía Amparo de Valverde y Compañía en la provincia de Nunca Jamás cuando salia de parrranda y anda anda y anda quese acaba la tanda. Fin.