Triste corazón de esperanza
no te ahogues por las vidas que alegraste
no te olvides de las pasiones que desataste
no te lleves mi razón.
Ahora no,
en mi momento más flaco no,
ahora que no puedo resistirlo
vienes para romperlo.
Ahora que,
tantas batallas ayudé,
tantos como el mío alegré,
no le dejes ir, quédate con él.
Búscale nueva compañía,
llévale rosas todos los días,
mójale de risas la esperanza
llénale de besos……………….
que no siga a la razón.
Ahora ya,
se quedó mudo de terror,
no lo pudo remediar,
lo que más le dolió…..pasó
se quedó solo, de verdad.