No todo es sinónimo de naturalidad,
hay noches en las que no se duerme,
ficciones que no escapan a la realidad,
voces que nunca se escuchan,
banderas que jamás se agitan,
logros que no se gritan.
Hay gitanas que no adivinan,
caricias que lastiman,
guerras que no terminan,
penas que forjaron alegrías,
heridas que no sangran,
derrotas que fueron victorias.
Hay puertas que no se abren,
corazones que no sienten,
gobiernos que desgobiernan el mundo,
corrientes que no tienen rumbo.
Hay historias que jamás se relatan,
otras, por generaciones se idolatran.
hay hombres, que hacen historia,
y algunos, son pretextos de su propia historia.
Existen momentos, cuya claridad
no te permite ver,
y otros, en la que su oscuridad,
te ayuda a resplandecer.
A veces, vivir es morir
desguarnecido en tu interior.
Y la soledad, es la compañía de alguien
que solo aprecia tu exterior.
La vejez, no es más la infancia
que regresa, intensa y traviesa.
Y el recuerdo, solo meditaciones viejas,
que duran un tiempo y luego se alejan.
Expones tu prosaico poema una gran cantidad de paradojas que nos abundan la vida. Efectivamente, compañero… la paradoja de nuestras existencias es que hay muchas ambiguedades rodeando el mundo. Un abrazo. Quizás la mejor compañía del ser humano sea la enorme cantidad de paradojas en que vivimos.
Hola Diesel… como estás??, sobre tu comentario, cuando defines al poema como prosaico, es por que lo consideras insulso o trivial o pragmatico.. o..? solo para entender mejor tu opinión, compañero. Y sobre tu conclusión, estoy plenamente de acuerdo, por eso expongo éstas contradicciones, una tras otra.
un abrazo.