Con tu guitarra al hombro,
tus ilusiones, sueños y quimeras
sales a conquistar el mundo,
aquel que deseas para ti y los que te rodean.
Bohemio, soñador e incansable trovador
del significado de la vida,
sigues el camino que te lleva
hacia la luz que a lo lejos se divisa,
y con un atisbo de calidez envuelve tu cuerpo
insuflándole fuerzas y razones para seguir adelante.
Buscador eterno de la vida y las personas
contagias con tu ímpetu
a todo aquel que se cruza en tu camino.
Nada tienes, nada quieres.
Eres rico con los sentires de las gentes
que comparten sentimientos, ilusiones, penas y razones.
Escuchas, guías y apruebas.
Te desvives por los demás
buscando siempre el lado bueno
que todo humano esconde en un rincón de su Alma.
Pero, y a ti… ¿Quién te escucha?
¿Quién sabe que es de lo qué careces?
¿Quién comparte contigo su pan?
¿Quién agradece tus desvelos, tu comprensión?
Tenemos mucho que aprender
mirándonos tan solo en tus ojos
en ellos escondes la verdad de tu persona
solo quien puede ver tu mirada sabe de ti,
solo quién sabe ver el brillo que surge de tus ojos
puede sentirse arropado por ti.
Hoy quiero agradecer el que me hayas dejado
adentrarme en esos tus ojos,
verme reflejada en ellos.
En su interior he podido ver el camino
que conduce a las ilusiones, sueños y quimeras.
Qué más da que sean efímeros o utópicos,
son el combustible que da vida al motor del corazón
Para seguir adelante en nuestro devenir diario.
!Besote, Wersemita!. Muchas gracias por tu lindo poema… y te quiero un montonazo…