La película “Traffic” fue considerada una película “difícil” por tratar con extrema crudeza el tema de las drogas. Algunos de los mejores actores del momento, entre ellos Michael Douglas participaron en el proyecto descubriendo en su propia carne la crueldad del mundo de los estupefacientes. Cameron, el hijo de Michael, había sido arrestado por posesión de cocaína, sólo unos pocos meses antes del rodaje de la película.
Una de las escenas más impactantes ocurre cuando el actor acepta el cargo de agente en la lucha contra las drogas: “Si existe una guerra contra las drogas, entonces muchos miembros de nuestras familias forman parte del enemigo. En este caso, ¿cómo podemos declarar la guerra a nuestra propia familia?”.
Buena pregunta.
Sé que desde muchos lugares hoy se está proclamando lo mismo. No me importa. Creo que debo decirlo desde aquí: LAS DROGAS MATAN DE VERDAD. NO LA PRUEBES. Son ya millones de personas en todo el mundo que han caído en los lazos fatales de alucinógenos y estimulantes. Muchos de ellos ya han muerto, otros están en camino. Millones de familias destrozadas, vidas rotas, sueños perdidos, y todo por un instante de placer: por un vuelo a la locura.
Así es el humano: capaz de crear sustancias para su propia destrucción. Capaz de probar la muerte en un instante de diversión atolondrada; sin comprender que se encamina a su fin, y que de esa manera “mueren con él sus esperanzas e ilusiones”.
Hay cosas que merece la pena NO conocer por experiencia propia. El grave secreto del asunto es hacernos creer que debemos probar todo para sentirnos libres de verdad. Esa es la mentira más grande, una mentira que lleva a millones de personas a la muerte.
¿Sabes?. Es infinitamente mejor que sepas disfrutar de tus ilusiones, de tus esperanzas, de tus sueños y que no pruebes sustancias que pueden matarte de verdad. Aprende a decir NO. Así de claro, y no importa que algunos se burlen de ti por eso. La verdad, no sé por qué razón las personas tienen la rara cualidad de querer arrastrar a otros al mismo infierno en el que ellas han caído. Déjalo ya. No la pruebes.