Boccaccio tardó 5 años en componer El Decamerón (1350-1355 después de Jesucristo) donde recoge un total de 100 cuentos narrados por 7 muchachas y 3 jóvenes que se encuentran encerrados en una casa de campo para escapar de la peste que asoló a Florencia (además de todo el resto d eEuropa). Es en la ciudad de Florencia donde Boccaccio sitúa su Decamerón.
Todos los cuentos tratan de temas amorosos, aglutinados por una ficción que se ha calificado de artificio, pero que en realidad es una denuncia de la inmoralidad que existía en aquellos años de transición entre la Baja Edad Media y el Renacimiento. La única faceta simbólica de la obra es una imaginación sobre los tristemente famosos “poetas negros de Florencia”.
Aquellas 7 muchachas y aquellos 3 jóvenes refugiados en la colina de Fiésole (ciudad de Tosocana donde existen restos etruscos (los más antiguos pobladores de Italia) y romanos, un castillo románico y otros monumentos y pequeños museos etnográficos, pasan las horas del dia paseando por los jardines y el campo y, después, en las noches (savo los viernes y sábados en los que se dedican a mantenr las reglas religiosas de respetar el descanso impuesto por los despóticos papas) se cuentan historias llenas de sensualidad, erotismo y hasta pornografía. Cuentos morbosos de campesinos que se ponen los cuernos unos a otros pero especialmete (y con mucha abundancia) de clérigos depravados, bebedores de vino (borrachos pendencieros) y de manera libertina amantes de mujeres casadas o solteras (porque a aquellos clérigos les iportaba un bledo los principios morales y éticos de los que ellos mismos hablaban en sis homilías. Eran los llamados “goliardos”.
El caso es que toda la obra está llena de cuentos de muy elevada pornografía (o por lo menos un erotismo que roza la pornografía) que, aunque en clave de humor, resulta que están denunciando las formas de vida en aquella Europa podrida de la transición de la Edad Media al Modernismo a través del Renacimiento y el Humanismo pagano.
Libro narrativo, esposas que burlan a sus cornudos maridos, campesinos que se engañan los unos a los otros, frailes “a lo loco” completamente depravados y, alguna que otra vez, un poco de romance inocente y sano entre alguna muchacha y algún joven (porque tambiéna hay de ello en El Decamerón aunque permanece muy oculto y hay que descubrirlo leyendo entre líneas).
Otro ejemplo de su contenido (y con esto acabo)e sque aparecen a veces jóvencitas inocentes que caen en las trampas amorosas de lo que conocemos como “viejos verdes”, hombres maduros y machistas sin ninguna clase de personalidad noble. O sea, hombres que, junto con los clérigos citados, son un cero a la izquierda a la hora de mostrar nobleza en sus acciones que son, por decirlo de alguna manera clara, bajezas y vilezas sin límites. También aprecen, y todo hay que decirlo, mujeres que actúan como verdaderas arpías.
Bueno. No narro mas cosas de su contenido. Es un libro que recomiedo que lo lean personas con sobrada capacidad mental como para ser consideradas maduras.