Disciplino el pensamiento para que no sea capaz de volverse en mi contra.
Examino las palabras y busco cuidadosamente, las mas adecuadas.
Pero no encuentro palabras que contengan una explicación. Solo contienen los resabios del miedo. Contienen angustia, dolor. Pero algo advierto en esta perturbante circularidad que es la vida: una sinapsis de la cinta que ya pasó.
Poco tiene de particular este mecanismo, la primera parte, es decir, la original, y la última parte, que es muy parecida a una copia y que también es la primera porque en círculo se repite.
Entonces, me habla de aquellos vaivenes, por momentos olvidados, extinguidos, que invaden el presente, que ya no es original; sino dolorosamente copiado de las cintas del pasado.
Entonces, ¿cuánto hay de original en un acto, una palabra, un gesto?, ¿cuántas veces se repite cada hecho, cada situación, cada decisión, si todo forma parte de un turbulento y poderoso círculo?.
Algo que comienza en mí, y en algún punto del trayecto se une con otra persona, termina en lo que soy después de haber regresado. Después de haberme marchado. Después de haberlo encontrado.
Estás describiendom, nada más y nada menos, el camino circular de la experiencia vital. No sé si lo haces de manera plenamente consciente pero has penetrado en la cinta circular de la existencia. Muy profunda tu refelxión. Por lo que tiene de camino. Ir hacia adelante dando vueltas al círculo completo de ese trayecto personal que nos hace ilimitados. Unm beso.