Aquí en la soledad infinita, donde las ventanas divisan los horizontes de la felicidad, me acerco una humeante taza de café y un cigarrillo que consume las horas deprisa… Bumbury con el desdén de lo que no pudo ser, cuando prefiere que seas feliz aunque no sea conmigo y Sabina en quiebra de una luna que le ha robado el mes de abril, busco maneras de escribir, de enfrentarme al maquillaje desierto de la pagina en blanco, aquí es donde te necesito… y llegan hasta mi los restos del naufragio de la memoria, vestigios que evocan lugares y circunstancias olvidadas, añejadas ya por un tiempo ingrato de lo que fuiste para mi, ahora que lo pienso… te ves tan parecida a otra, con marcas de un camino difícil, como si el fin del mundo comenzara contigo, la derrota es inminente,
sospecho que ni siquiera te diste cuenta en que momento dejaste de soñar y como se te fueron acabado las mentiras, esas que en muchas ocasiones te creí, ahora, los espejos anuncian como te detuvo el desamparo, como fuiste cayendo en abismos cada ves mas profundos, el espectro de tu imagen me tiene confundido, me angustia pensar que de alguna manera vivías de recuerdos inútiles, que por las noches el espesor de aire enrarecido que alguna ves confundí con las nostalgia que me provocaba mirarte, pero que después descubrí que era como un mecanismo de defensa que emanaba de ti, había terminado por asfixiarte, se que será difícil conservarte intacta en mi alma, que al final, seguirás siendo una serie de espejismos baratos, que tarde o temprano, deberé ajustarme a una realidad aterradora cada ves mas notoria…y enfrentarme al hecho de que la gente cambia …
Pero ya esta amaneciendo y hoy, ¡hoy! Parece un buen día para comenzar
dedicado para Alondra
Donde quiera que se encuentre