El madroño
en el otoño
alarga su luz
y los cipreses grises y altos
ensombrecen a la tumba
y la cruz.
Bajo un abedul
nace el retoño
del avestruz
y bailan los sobresaltos
de las magias de la luna
en la testuz
de ese toro negro y bravo
que espanta con su rabo
a la mosca verdiazul.