Hay días en los que necesitas de alguien a tu lado y buscas, te aferras a quién no tienes. Deseas impaciente la atención requerida sin llegar a entender el porqué de la negación.
Somos egoístas reclamando y exigiendo una compañía que no se nos es dada, sea por la razón que sea. Debemos entender y comprender que no todo el mundo se mueve a nuestro alrededor. No podemos perder la vista observando continuamente el horizonte por ver aparecer la silueta esperada.
Lo primordial: no imaginar, no pensar ni calcular, entender a los demás, y como no, también es necesario que nos comprendan.
Si gritas que tu lema es “Vive y deja vivir”…ponlo en práctica
Nadie es perfecto y yo menos que nadie, pero ¡Sí! somos seres especiales para alguien y eso es lo que cuenta.