“Jamás he intentado aprender algo de alguien a quien no haya envidiado, por lo menos, un poco. Si no hubiera sentido envidia, no habría aprendido nada”
(Tomado de los proverbios de Vorem)
De la vanidad, de su linaje, de su estirpe gozosa,
quedé prendado. Me arrebató el destino la ira y me hizo viejo.
Tras los densos pensamientos, vacilo una y mil veces por
proclamar mi derecho a una y mil vidas, pero la mezquindad
de la muerte me sobrecoge y me espanta.
¿No fueron los designios del cielo quienes se conjuraron contra
mi deseo? ¿No sesgó mi existencia la propia vanidad teñida de esperanza?
No puedo regresar, y tú lo sabes, corazón cansado.
Apresúrate pues, y acierta ya en tu empeño
de hacer de tu existencia el noble sueño
de mentirte una y otra vez, y así cesar callando.
De la vanidad, de su linaje, de su estirpe gozosa,
quedé prendado… ¿Romeo y Julieta?
De la vanidad, de su linaje, de su estirpe gozosa,
quedé prendado… ¿King Lear?
Tras los densos pensamientos, vacilo una y mil veces… ¿Hamlet?
¿No fueron los designios del cielo quienes se conjuraron contra
mi deseo?… ¿Ricardo III? ¿Macbeth?
Hacer de tu existencia el noble sueño… ¿Sueño de una noche de verano?
Leer a Shakespeare es proclamar tu derecho a una y mil vidas.
Maravillosa forma de mentir.
Teatro, lo tuyo es puro teatro.
Maravilloso poema, shakesperiano por todos los costados.
Saludos Only. Muchas gracias por tu comentario. Creo que la disección es muy interesante. Toda la obra de Shakespeare se mueve entre arquetipos. De la boca de Hamlet….sólo puede fluir la energía de la duda. Siento pasión por las versiones cinematográficas japonesas, que recrean a Shakespeare. Van más allá, y multiplican su estética, y ahondan en un humanismo transgresor.
Lo mio con el teatro es “pasión secreta”. Un saludo y gracias.