¿Que error es el que cometí?, ¿cual fue la piedra con la que me di?
los charcos mojando mis pies, resbalo y me vuelvo a caer.
El sol se esconde porque no quiere verme
el frío que siento es incompatible, ni sus rayos podrán atravesarme
ni su calor podrá calentarme, ya no me quema, no consigue quemarme.
Las flores van deshojando sus pétalos que se marchitan igual que el viento
¡hasta el aire que sale de mis pulmones sale corriendo!
dejando que me asfixie en mi propio ego.
La luna me dice que no la mire, que con mis ojos teñiré su brillo
y no será entonces una noche tan clara y bonita…
¡ni las estrellas querrán su compañía!
La oscuridad no me hace sombra, no tengo sombra, ¡no soy persona!
teniendo mas luz que la de mi propia mirada
que no llena mis huecos donde la luz no alcanza…
agujeros sin fondo… ¡largos profundos y retorcidos!
El eco no me devuelve la llamada, no tengo voz, ¡no tengo nada!
si hablo ¿para quien hablar?, si grito ¿quien me escuchará?
Ecos que se callan en el silencio, retumbando aquí, en el pecho…
corazón es quien los oye, quien me chilla, quien los sufre.
¿Donde esta la piedra que dice enseñarme en los errores?
Iré a buscarla en las montañas, en el bosque ¡donde las haya!
La encontraré, se que ella me encontrará
pues aquella en la que tropiece, ¡esa será!.