Escribo…
Lo intento, diletante,
describiendo esquinas sin tiempo,
de silabas intensas suspendidas,
en la síntesis del momento.
Escribo…
por que cómplice, me alienta,
me oculta tras puertas abiertas
diluyendo el itinerario,
que resume el alma del poeta.
Escribo…
me permite ser y no ser,
vivir y desfallecer,
conjugar mis sentimientos,
todos a la vez.
Escribo…
lo hago, para sustraerme del olvido,
encontrarme a mi mismo,
y comunicarme contigo.
Escribo…
Convencido, de que las ideas,
son las metáforas del día,
y al anochecer, solo cuentan,
la pasión por el verbo y la vida.
Escribo…
lo intento, diletante,
describiendo esquinas sin tiempo,
que desde mi sitio, plácido,
contemplo.
Bien construido y bonito, compañero voremista. Escribir es una sensación donde tú has recogido, en el poema, varias de las corcunstancias trascendentales por la cual un hombre o una mujer toman un papel y escriben un verso cualquiera, convencido de que las ideas, como tú bien señalas, son las metáforas de cada día. Si. Eso de que las ideas sean diletantes me convence. La pasión y el verbo por la vida también. Por eso a veces escribo y a veces siento que escribiendo me aligero del peso de la existencia.
Hola Carolina, Te agradezco el comentario, creo que es la primera vez, que opinas sobre un texto de mi autoría, es mi intención escribir sobre temas que pasan desarpecibidos, que tienen cierto impacto social o emocional ya sea individual o colectivamente, te invito a que leas los textos que he publicado en el vorem y espero que no agredan tus ideologías.
Mucho gusto, y te envío un cordial saludo.
José Luis.
Escribimos poemas describiendo las esquinas del tiempo en que los vivimos con intenisdad, amigo vorémico. Escribimos con el pensamiento diletante desde un sitio de la conciencia para sustraernos dcel olvido como tú muy bien señalas en el poema. Tal vez los sentimientos escritos sean mayor reflejo de nuestra coincidencia entre lo verbal y lo sentido. Sentimos y por eso escribimos. En tu texto encuentro una conjugación de la necesidad de escribir con la necesidad de ser escuchado… me gusta por lo que tiene de coloquio entre ambas necesidades humanas.