A Tan Añoro
A tan estimo
Ardientes forjarse cuales flechas su destino
en hambriente pasion desenfrenada
enfermante sed rosada
de unos labios aun virgenes
a un corazon blanco y puro.
Mas silenciosas suenan sus palabras
Al poder divino del amor
amargas y saladas lagrimas raspan
un alma triste y apenada.
Que las palabras silentes no raspen el alma por mucho tiempo, un abrazo
Pues en este dolor hayo la vida.
En este dolor la vida adquiero
y es tan intenso su fulgor
que muero…
(Saludos)