Piensa en mi esta noche como yo lo hare en ti.
Escucha la lluvia besar apasionada la tierra,
Que así, escucharé tu ligero susurrar en el gota a gota
Me has dado tus lagrimas hoy, mientras yo te daba mi hombro,
humilde quise entrar a tu Fortaleza, la cual abriste sin desdén
abriste incluso la boveda de tu amor y la pude sentir.
La fuente de tu seda con la que me cubres cada noche,
la fórmula de tu hechizo sagrado de besos,
las delgadas cuerdas de algodon que miman mis sollozos
y asesinan mis monstruos nocturnos. !Tu secreto!
Lo amaré, como lo has hecho tu, hasta donde mi respiro lo permita.
Agradecido, Amada mia, me incliné a los brazos de Morfeo,
Borracho del vino de tus besos,
bajo las eternas lamparitas titilantes incrustadas en la gravedad,
Extasiado en los efectos de tus caricias,
Perdido aún en la sobredosis de tu piel,
Gozando en las tierras del otro mundo de los exquisitos nectares de tu boca,
Sensual, suave y erotica
Que me llama constante con su excitante aliento
La lluvia de tus ojos no termino salada
Sino con el mejor de los sabores que los mortales corazones hayan probado jamas
Y asi, mi doncella fiel, es como perseveras en mi
El agitar de la mariposa, el fogon de mi rubor,
El sonar del gran tambor,
y el temblor del terreno que a ti ya pertenece
Ahora duerme, cierra las ventanas de tu alma
Que esta noche yo custodio la entrada a ti.
Y juro alejar, incluso la visita de la parca misma
Al sacro terreno, del amor profundo
y verdadero
Preciosa la última estrofa, en la que te eriges paladín de tu amada.
Un saludo.
Gracias Laguna, un abrazo calido a distancia.