a la hora de ponerse a escribir siempre pasa lo mismo, que no importa lo breve o extenso que quieras hacerlo… !lo difícil es empezar!. Pero no hay que hacer otra cosa sino que, llegado ese momento en que deseas escribir algo, regocíjate con él, extiéndelo todo lo que sea necesario (aunque vayas a escribir un sólo párrafo) y goza, disfruta incluso auque estés dispuest@ a expresar algo doloroso de tu interior. Si lo necesitas, abre una cerveza, fúmate un cigarrillo, toma un café o haz cualqueir otra cosa para sentirte feliz. Yo, por ejemplo, siempre que escribo escuho musica de fondo. Tengo una amiga que siempre decía que era imposible que ella llegase a escribir. Leer le gusta muchísimo pero escribir… !vaya problemón!. Yo le dije que no se amilanase y le aconsejé que estirase el momento en que tuviese ganas de escribir, hasta sentirse con deseos de hacerlo. Ahora escribe mucho, lo hace excelentmeente porque disfruta con ello y es feliz haciéndolo. Y sobre todo no sigue reglas cercenadoras de su pensamiento ni “modismos” o “ismos” impuesto por los que se dan de “entendidos”. Sólo extiende su momento. Y escribe…