Güisqui en el café (La balada del café triste / Carson Mc Cullers)

He de decir que este libro, que recoge un total de siete cuentos agrupados alrededor del ámbito de los pueblos centrales de la meseta norteamericana, es realmente delicioso y encantador. De muy sencilla lectura pero de muy honda interpreta ión. La balada del café triste es el cuento que da título al libro y está acompañado por Winderkind, El jockey, Madame Zielinsky y el rey de Finlandia, El transeúnte, Dilema doméstico y Un árbol, una roca, un pueblo…

Cuentos de estructura prodigiosamente bien lograda, llenos de un ritmo lento pero penetrante donde el pasado y el futuro se funden en personajes a los que la autora les da voz y se la quita continuamente para hacernos recordar e interrogarnos a la vez. Son cuentos llenos de gran sensibilidad y el principal de ellos gira en torno al triángulo amoroso entre Miss Amelia Evans, el jorobadito primo Lymon y el ex esposo de Amelia. Un triángulo lleno de amante y amado. Ella ama al deforme y malvado Lymon que la tiene obsesionada y como sabe que es amor imposible lo encierra en su corazón mientra Lymon prefiere al terrible ex esposo, facineroso y terrible pero quizás por eso atractivo para el bisexual.

En otros cuentos hay cuestiones tan curiosas como las de la mentirosa Madame Zielisnky que crea un rey en un país donde sólo ha existido siempre la República, un Bienchen niña prodigio que deja de serlo porque nunca lo fue, un Martin Meadows que soporta, por amor doliente, las borracheras y palizas de su propia mujer, un Billy Barlow solitario y borracho que sin embargo tiene fuerte conciencia social ante las injusticias, una serie de microscosmos de canciones dolorosas para ser leídas con un güisqui en la mano en un café de madera, casi destartalado de piro viejo, antigualla de lo que en sus tiempos fue lugar de esplendorosas reuniones.

Sé que os van a encantar estos relatos de Lula Carson Smith (Carson Mc Cullers) porque si os detenéis un poco en sus maneras narrativas viene a ser una autora que posee el estilo de los grandes cuentistas rusos (me refiero a Dostoievsky, Chejov y Tolstoi) pero con una expresividad mucho más sencilla y enganchadora para unos lectores y lectoras que a los que nos convierte en niños leyendo cuentos para adultos.

Son los recurrentes temas de la soledad y el aislamiento para transportarnos al amor profundo e íntimo, ese que es el amor verdadero porque sólo se puede entender empatando con la persona amante (y nunca con la persona amada) carente de egoísmo. Un amor doliente y doloroso que se enraiza en lo profundo del corazón de quien ama.

La balada del café triste es una maravillosa región solitaria y sencilla del mundo interior de los protagonistas. Son las contemplaciones minuciosas llenas de dudas y de afirmaciones aun en contra de toda lógica puritana. Son los aislamientos espirituales que nos guían para entender las emociones desde el centro mismo de ellas: ver, conocer y experimentar las cosas después de vistas y conocidas par viajar por nuestro propio interior.

Es muy bueno. Leedlo. Os va a gustar.

4 comentarios sobre “Güisqui en el café (La balada del café triste / Carson Mc Cullers)”

  1. Conozco el libro. Muy bueno. Muy recomendable para trasponer ideas preconcebidas sobre lo que es la persona que ama y la persona que es amada. Son una serie de cuentos magistrales escritos por una persona que amó y desamó y que estuvo presa de una enfermedad que la hizo sentir aún más fuerte el amor y el desamor en su propia exoperiencia personal que transmite en la balada que es un libro con eso, con ritmo de balada…

  2. No lo he leído, pero me han comentado bastantes veces sobre este libro. Leyendo tu texto voremista creo que voy a pasar un grato momento entre sus páginas… así que lo voy a comprar ya mismo. Te comentaré mi análisis. Creo que está publicado, si no me equivoco, por Seix Barral en libros de bolsillo.

  3. Efectivamente, Seix Barral lo publicó hace ya alguna década. No sé si habrá habido nuevas versiones pero creo que sí. Cómpralo o léelo en alguna biblioteca-. Es muy bueno de verdad.

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