Ha llegado el Invierno, canta con voz transida
la fría agua que lava mi sueño,cada día.
El Invierno ha llegado con su cortejo helado,
de nieves y aguaceros de cielos desolados.
La lluvia caerá con su cortejo frío
cubrriendo casas, campos, árboles, sembradíos,
yo guardaré el calor del verano vivido,
de las noches de amor, bajo el cielo encendido.
Más, para mí, el Invierno, tan sólo habrá llegado,
cuando encuentre en mi huerto, el naranjo dorado,
florecido de frutas olorosas brillantes,
con sus hojas tan verdes, con sus duras espinas ,
como guardias armados, que cuidan la colina.
Cuando arranque una fruta, a pesar de los guardias,
y rompa la envoltura de su cáscara blanda,
se esparcirá, en el cuarto, la fragamcia de oriente
que exale la naranja, al morderla,tus dientes.
Se vaciarán, los pomos de olores de las frutas
y traerán recuerdos de sus flores, tan puras,
y el Invierno presente con su carga de fríos
será la Pimavera, de los frutos benditos.
Mel me ha encantado tu poema he sentido la frescura primaveral del invierno, un beso
Bonita estampa de tiempo encarnado en los pomos de las frutas olorosas. Invierno y Primavera conjugados por tu bella poesía. Un saludo.