Las palabras que jamás te he dicho
Siguen guardadas aquí
Y tú, que estas y no estas
Como siempre no es el momento
Las miradas que jamás he cruzado
Siguen haciendo brillar mis ojos
Y tú, que vienes y te vas
Para no variar se nos pasa el tiempo
Los abrazos que jamás te he dado
Siguen adheridos a mis huesos
Y tú, que apareces y te evaporas
Así quedo yo, rumiando en el silencio
Tantas cosas en espera, contenidas
Caricias ardientes que se me escapan
A intervalos impacientes
¡Y tú, que tardas tanto!
No me queda más que esperarte…
Ojalá que espera dé sus frutos. Sino no hay por que desesperar, algún día sin buscar a nadie te caerá una manzana del cielo. Suerte!
muy profundo el mensaje y el sentimiento de control y descontrol en el mismo da una sensacion de humanidad muy natural y vivida es como si describieras lo que sentimos los mortales por aquel ser amado al que por mas que le demos no logramos entregarnos de el todo
una verdad-romantica
crisantemo-azul