Mi alma tiene una calle,sólo una,pero está empedrada de miles de recuerdos…también tiene algunas piedras,en las que tropiezo más de tres veces…
Dos farolas enormes alumbran mi vida…son tus ojos cuando me miras,no…no los cierres nunca,nunca dejes de mirarme…me perdería y me caería…
Por debajo de la calle corren cañerías,son mis venas…que dibujan tu nombre…por ellas,corren mis alegrías y mis penas.
Cuando llueve,es mi corazón que llora,que moja los recuerdos y hace que se empañen las ventanas que mis pensamientos tienen para ver el mundo…y hacen que se me nuble la mente.
Cuando llega la Primavera,es el amor,que hace que mis árboles echen sus frutos y florezcan de una forma sinpar.
Cuando llega el Invierno,con sus nieves,es el odio,que hace que todo se congele y pierda su vida…
Cuando estás a mi lado,vivo en una eterna Primavera.
Aquí,en ésta calle no hay coches,no hacen falta,sólo hay peatones,son todas las personas que permanecen en mi recuerdo,en mi vida…algunas son estáticas y no me aportan nada;otras se mueven,avanzan en mi vida y conmigo…como tú…quiero llevarte de mi mano hasta que se acabe la calle…
¿Vendrás?
Para las personas que hasta hace muy poco eran muy especiales para mí…y que ahora por circunstancias,ajenas o no,no importa,ya casi son sólo eso:un recuerdo.
Y,por supuesto,para mi chico.
Un saludo y sin rencores por mi parte.
Simpre os he querido…aunque no os lo creais…
Y es que las calles son los mapas orgánicos de todas nuestras anatomías, Crix.