La tarde…extraña.
Mi tiempo…extraviado.
Tu presencia…extranjera.
(y todo se conjuga invocando
un caos lleno de nostalgia)
La melancolía…extensa.
Mi vida… en un extremo.
La tuya …exitada.
Me hablas …exquisitamente .
Me dejas… excluida.
y camino… extenuada.
(creo que tengo que rajar la cortina)
Entonces bailo… exonerada.
Sin culpas, vuelvo a levantarme casi… asfixiada.
y me acerco para elegir…Excelente.
Abro esa puerta… en el muro… oxidada.
un escalón … y el precipicio…
me quedo…extasiada…
2 comentarios sobre “Lo que el ojo izquierdo ve”
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Y en mitad de tantaintensidad…esperar lo inesperado. Saludos.
Pero jamás te lances al precipicio, compañera. Que los Judas se lanzan al vacío sin tener nadie que empujarles..