No tengo miedo..de dar mil vueltas en una misma ciudad,
Subir la Meridiana,pedaleando descalza la Diagonal,
Hasta llegar llorando y de vuelta, en la playa,
lo que tuve y ya no está,
los recuerdos que dejé,en alguna esquina,de la estacion de autobuses de la capital,
Destapar la cajita secreta que contenia arena y sal….amor y cal…
Sueños…sueños de juguetes,de niños perdidos,que escalan,mientras enredan sus almas en alta mar.
No, no tengo miedo de cambiar de nuevo mi vision,de crear mas instantes infinitos,
con suaves melodias y reconfortantes brisas.
Y que el sol,me sorprenda,rasgando con la punta de mis dedos,un amanecer…
Era el cielo y porqué no decirlo,nosotros su secreto a voces,su escondida amiga luna.
No,no tengo miedo de dar mil vueltas en una misma ciudad..,si sé que llegaré al punto en el que mis pies,con tu voz,de nuevo aprendan a caminar
2 comentarios sobre “No tengo miedo”
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!Precioso texto, Lullaby!. Con un gran sentido interpretativo expresas una nostalgia de compañía enhebrada en la voz del caminante. Es muy profundo lo que has dejado escrito. Ejerce un fuerte impacto en la sensación de conciencia que crece y medita. Un besote, compañera.
Este pedacito de espacio interestelar fué la conclusión de una inspiración hallada en un dia de julio,con su amanecer desde una azotea Barcelonesa junto a un errante y soñador cantautor, disfrazado de humanoide también,donde averiguamos de que hablan los pajaros,jajaja,”el descubrimiento”del año