Noche de fresca locura…

Noche de fresca locura. El tiempo aniquila los espacios de las esquinas donde las sombras pululan buscando necesarios incendios. La calle es larga y largo es el camino. Noche de fresca locura y el canto de los mirlos han sido ya silenciados por las sombras de los búhos. Noche de fresca locura. En las esquinas de la larga calle se incendia el paso de los humanos. Hay manos que te agarran para detenerte… pero tú sigues tu camino sin ver más que una oscuridad honda en la que penetras para salir por el otro lado del túnel. Sigues siempre adelante, sin pernoctar en ningún oscuro hueco de los vacíos siniestros donde dónde anidan las desesperaciones de los fantasmas. No vuelves la vista atrás para no tener que rememorar tiempos ya perdidos entre las sombras de las esquinas.

Y al final encuentras esa luz lejana en donde el túnel termina para salir a la Avenida de las palomas blancas y ese símbolo de neón encendido que tiene como emblema la loca fantasía de un ser humano real. Noche de fresca locura. La lucidez de tu pensamiento se convierte en góndola para navegar por la corriente marina y al llegar al final del camino por fin te encuentras con el Paseo de los Enamorados. Noche de fresca locura. Son las diez y cuarto y las estrellas ya están comenzando a alumbrar. Nuestros besos se funden en una atmósfera de misterio y luz al mismo tiempo. Sólo vemos ya la Felicidad que ha comenzado en esta Fe de Edad rejuvenecida hasta el momento en que conocimos nuestras primeras alegrías. Noche de fresca locura. Ahora son ya las diez y diecisiete de la noche. Vamos a seguir hablando de relatos, y de cuentos y de historias vividas en nuestros íntimos y eternos Grandes Sueños hasta que el reloj dé las diez y veinte de la noche con total exactitud. Nos falta solo algo más de un minuto para conseguirlo. Tiempo suficiente para darnos el ansiado beso lúcido y lucido de lo anteriormente vivido. Ya está.

Una vez más lo hemos conseguido tú y yo al mismo tiempo… el beso ha durado exactamente tres minutos con doce segundos. Noche de fresca locura…

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Noche de fresca locura…

Noche de fresca locura. El tiempo aniquila los espacios de las esquinas donde las sombras pululan buscando necesarios incendios. La calle es larga y largo es el camino. Noche de fresca locura y el canto de los mirlos han sido ya silenciados por las sombras de los búhos. Noche de fresca locura. En las esquinas de la larga calle se incendia el paso de los humanos. Hay manos que te agarran para detenerte… pero tú sigues tu camino sin ver más que una oscuridad honda en la que penetras para salir por el otro lado del túnel. Sigues siempre adelante, sin pernoctar en ningún oscuro hueco de los vacíos siniestros donde dónde anidan las desesperaciones de los fantasmas. No vuelves la vista atrás para no tener que rememorar tiempos ya perdidos entre las sombras de las esquinas.

Un comentario sobre “Noche de fresca locura…”

  1. Muy bien relatado y lindo paraje nos presentas Diesel. Es bueno siempre estar por acá y ver la realidad con otros ojos. Me parece un texto bien descrito, con esa prosa-poetica-novelesca, jaja. Me gustó caminar en esas calles. Saludos Diesel!!!

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Noche de fresca locura

Noche de fresca locura. El tiempo aniquila los espacios de las esquinas donde las sombras pululan buscando necesarios incendios. La calle es larga y largo es el camino. Noche de fresca locura y el canto de los mirlos han sido ya silenciado por las sombras de los búhos. Noche de fresca locura. En las esquinas de la larga calle se incendia el paso de los humanos. Hay manos que te agarran para detenerte… pero tú sigues tu camino sin ver más que una oscuridad honda en la que penetras para salir por el otro lado del túnel.

2 comentarios sobre “Noche de fresca locura”

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