No sé donde está el límite entre la amistad y el cariño, y entre el cariño y algo más.
No sé dónde está el límite entre la admiración y la adoración.
No conozco el limite de nuestras miradas. Y no sé por qué intentamos hablarnos con ellas.
No sé dónde acaba tu espacio y empieza el mío.
No sé por qué se confunde el chocarnos con tocarnos.
Yo creía que me sabía todos los límites, como una lección bien aprendida. Pero tu eres la excepción que confirma la regla.
No me ilusionas, asi que no me decepcionas.
Pero me da miedo.
No me dejes hacerte daño, por favor… eres demasiado valioso, quizás, hasta para mí.
Puede que el límite esté ahí …
– Esta noche no me podía ir a la cama sin decirte algo(…)