A lo ultimo,
que eres tú esperanza que corres sin sospecha alguna,
como angel de noche que sambulle mi mente y lastima mi corazón.
quien eres tú esperanza, para darme alientos de que venga, a mi aposento,
teniendo ya sus labios besados y su corazón casi muerto.
quien eres tú, esperanza, que sondeas mi querer, mas no me insistas,
pues nunca la obtendre, desesperada muerte y esperanza, desesperanza, odio, pasion, angustia, soledad….
quien eres tu, esperanza irrisoria, de emblematicos adioses y soñados regresos, por favor esperanza comvertida en muerte, por amor, llevame a mi primero.
Poesía original.Y es que la esperanza de los poetas es poder ser originales para tener esa esperanza de poder llegar. No a la muerte, Albert, nunca a la muerte, sino a esa existencia donde la esperanza, como bien dices, corre sin sospecha alguna. A veces es bueno zambullirse en la mente aunque se nos lastime el corazón porque el corazón siempre tiene recursos para superar los olvidos pero la mente, Albert, la mente nos da alientos. Sin embargo el corazón late. ¿Comprendes la diferencia?. En tu poema dices que la esperanza es un sondeo. Si tuviésemos que hacer un sondeo entre los pobladores del mundo veríamos que siempre existen hombres y mujeres que son emblemáticos soñadores de la esperanza. Un abrazo cordial, Albert.