Sara y el secuestro de su imaginación

De pie frente a la ventanilla intentando ver mas allá de esa cara que me mira, (siempre le he visto cara a la luna una expresión un tanto triste, con la cara ladeada y en posición tres cuartos, de niña pensaba que esa tristeza era a causa de nuestro comportamiento con los animales y la maldad humana)
Inútilmente sigo escudriñando, busco la inspiración en la plateada, que esta vez parece sonreírme desafiante picarona, tras otro bandazo del traqueteo del tren en este interminable viaje en el Transiberiano, parece nunca se va a acaba, vuelvo a sentarme abriendo de nuevo mi portátil, reaparece en la pantalla mi simpática mascota virtual y de nuevo me pongo juguetear con el simpático gatito que tengo de compañero ayudante, agregado en la pantalla, en ocasiones incordia pues aparece donde menos te lo esperas, pero en otras se hace simpático, cuando comienza a lavarse o te lame comportándose igualito que un gatito de verdad. El motivo de mi incapacidad creativa obedece a lo siguiente:

Tengo que hacer un ejercicio para mi táller literario gratuito, dicho ejercicio consiste en inventarme un relato de unas 60 líneas que contenga las siguientes palabras todas ellas relacionadas entre si.
*Ventana
* Luna
* Peine
* Ordenador
* Tren
* Música
* Vaca
* Pie
Y como en otras tantas ocasiones cuando llamo a la puerta de imaginación:
.-Toc. Toc. Ima.- Imaginación,.-te necesito,¿ podemos vernos?..- Soy yo.-Sara
Sencillamente, “Ima” (como la llamo familiarmente,” imaginación” es muy largo y serio para alguien con tan buen humor como Ima ) como decía, Ima me ignora.
.-¿Por favor? Querida imaginación,.- ¿estas?,.-¿estás disponible?, nada ninguna respuesta, el silencio, mas rotundo, ni siquiera una respiración entrecortada, que denuncie que hay alguien escuchando mis palabras.
Yo insisto..- ¡Por favor! Te necesito,.- nunca te he necesitado tanto, no me sale nada, no se me ocurre nada, necesito que me ayudes, me pongo de rodillas ruego, soy patética.
O bien se haya de vacaciones en un país exótico o tal vez esta mas cerca pero este donde esté, no ha dejado la dirección ni se ha llevado teléfono móvil, imposible localizarla o a ocurrido algo….. ella es… un tanto locuela, gusta de aventuras arriesgadas, lo mismo no ha sido lo suficientemente cuidadosa y la han cogido y ala… al trullo (la cárcel si Vds. me entienden)o tal vez, precisamente A MI ES a la última persona en el mundo a la que quiere ver, o se ha encerrado con multitud de LIBROS LIENZOS Y PINTURAS y no quiere volver a tener contacto con ningún ser humano o DIOS MIO ()pero… HA MUERTO… o a regresado a su planeta…..
De pronto el tren frena, un terrible TACHAN-TACHAN –chunda-chunda de una banda de músicos casi todos percusión nos indica que el TranSiberiano a llegado a un pueblecito del Caucaso en fiestas, él colorido las risas me llevan a abrir la ventana no sin antes intentar atusarme frente al espejo, mi enmarañado revoltijo pelyrrojo, tarea ardua y complicada, pues mi arcaico peine tenia el total de púas a la baja, no es que yo fuera tan pobre, era mas bien (como dirían mi madre y mi0imaginación) que una servidora es un tanto dejada, lo cierto es que abrir y cerrar la ventanilla del vagón fueron dos operaciones en una, de la rapidez con la que las efectué pues los oídos ya los tenia totalmente inutilizados por el ruido atronador.
Pero mi pituitaria entraría en trance al percibir (pensaran Vds. En fritangas de feria dulcus y cosas de estilo verdad, pues no lo que entraba por la ventanilla como si de una manada de 2000 reses se tratara, era un intunsísimo olor a estiércol de vaca tan fuerte y vomitivo que casi me hizo ídem, la imagen de cientos de vacas entrando en mi compartimiento era inevitable.. Así que cerré mi ordenador. Llame al camarero u me pedí un te con limón y un enorme brandý por fin tras una eternidad salimos del pueblecito infernal.
Ahhh me sentía agustito, ya me daba todo igual que no viniera ni a tiros imaginación, si no se me ocurría nada, para el relato que se iba a hacer otro día seria mas fructífero, pero y si no volvía q ver nunca mas a mi Ima un terryble escalofrío recorrió toda mi columna vertebral, no pude evitar dar un saltito en el diván y multitud de pensamientos negativos acudían en tropel sin ser invitados a mi cabeza casi era como si me los estuviera contando Ima, pero no ella no estaba conmiwo ¡ojala!, en estas y otras divagaciones parecidas estaba , cuando de pronto, escuche un fuerte golpe que desde fuera propinaban en la ventanilla, al fuerte golpe le acompañaba una especie de campanilleo familiar, sobresaltqda, me levante de un salto acersándome a la ventanilla algo la golpeaba por la parte superior pero el calor del interior había vormado una gruesa película de vqho, pegue la cara al cristal pasando la palma de la mano para quitar el vaho y poder distinguir< un grito apenas audible salía somo un hilillo de mis amígdalas si si…ese talón me era muy conocido ese tobillo, sus cinc deditos , ese pie, el puente e| empeine, todo tan bien formado, tantas veces masajeado, por mis manos sonrei al pensar y tantas cosaquillas. , hasta la tobillera yo la había criticado muchísimas veces por lo escandalosa, con ese soniquete con, tantas moneditas y cascabeles, parecía de una prostituta cíngara, como me arrepentía de aquellas palabras .
Pero esto ero lo único que había, no había mas un corte0limpio y un nudo mantenía atado el maravilloso pie al techo del vagón obligando a golpear de continuo en un tétrico pum pun cada cinco segundos acompañado de tililintililin de los cascabeles sii era el pie de imaginación.
Los ojos se me llenaron de0lagrimas en el mismo momento qu los dedos daban en el cristal dibujando una s y una a , esta vivo el pie esta vivo, no me lo potia creer, pero clro, Ima no era humana, porque no podría sobrevivir su pie, esto cambiaba mucho las cosas, salvada por la campana, con diligencia y unas tijeras corte la cuerda con ternura cogí el imprescindible pie amigo, todavía no sabia como podría co}unicarme con el o ella pero lo cierto es que de ahora en adelante siempre estaría a mi lado, mi0inseparable Ima,
Por desgracia “y eso que le desagradaba” ya nunca la quitaría el cascabel para saber siempre donde estaba el pie de Ima

Moraleja: No hay que ser egoísta ni siquiera con uno mismo

2 comentarios sobre “Sara y el secuestro de su imaginación”

  1. !Hola, Alexis!. Sacaste mucho partido al texto de las palabras propuestas que es un ejercicio típico de los talleres literarios. Esa Ima de tu relato está planteada de una manera sui géneris y llama la atención la gran reserva de fructífera escenografía en que te adentras en un momento especial que se llama encuentro y desencuentro a la vez. El trance de percibir en el ámbito de la propuesta una rápida visión con acentos de ilusionismo. En el espejo de la ventana está reflejada la huella de tu búsqueda. Da la sensación de que tu texto corre en dimensión urgente pero al final lo serenas con gran capacidad. Un beso, Alexis.

  2. Muy simpático Alexis. Ima me recuerda al niño que no entiende de normas. La imaginación juega cada día a un nuevo juego improvisado por ella misma. Cuando proponemos nosotros las reglas, el guión…etc, ella se lo piensa y tras un largo rato de desesperación por nuestra parte decide si sí o si no dejarse fluir. Un beso.

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