Sensaciones mezcladas, sentimientos que crecen,
sueños que parecen por momentos desvanecerse
tanta ambivalencia junta me confunde, me aturde…
Ojos tristes, miradas que se pierden, voces que callan,
almas que sufren, y otra vez el silencio…
Es como si el amor se me quedara en la garganta,
y ninguna parte de mi cuerpo pudiera expresarlo,
es el TE AMO no dicho a tiempo, el abrazo lento,
la esquivez sin altura, la indiferencia de mi boca.
Es querer sentir lo que no siento, ser lo que no soy
ir donde no debo, pero también quedarme donde estoy.
Para un alma como la mía tu amor es tanto que duele
cura pero duele, da luz pero duele, otra vez la ambivalencia…
Y una vez más como una constante en mi vida, la inmadurez
el valor que se me escurre entre los dedos , y el huir..
Es todo, es nada, es querer y no querer
es querer estar pero también irse,
es sentirlo pero no decirlo, tal vez es negarlo…
Será después el arrepentimiento, como un devenir casi cierto
mis ojos te buscarán pero serán los tuyos los que me evadan
los que cansados miren ahora hacia otro lado…
Será la desdicha, el desconsuelo, el desamor
serán nuestras vidas alejadas por miedos absurdos,
por callar, por hablar a destiempo, por omitir, por negar..
Y, por qué no, por este burdo egoísmo
que en un instante puede arrebatarlo todo.
Pero aún en medio de la niebla hay una luz, una esperanza
toda esta inquietud se la llevará el viento,
recogerá las lágrimas una por una,
y el dolor como un sentimiento trascordado
habrá de marchitarse confuso y olvidado.
Y habrá certezas, habrá nuevos sueños,
y las sensaciones ya no estarán mezcladas,
sino que permanecerán cada una en su lugar,
sin fundirse, sin mezclarse, íntegras, intactas
en el lugar del cual nunca debieron haberse ido.
Es muy profunda tu meditación Estrella. Está llena de encuentros con las ambivalencias que transforman la quietud en desasosiego… pero me encanta la forma en que matizas lo vivido con lo desados. Un beso, Estrella.