Desde la luz, la más tímida; luz de la tarde
que se refleja, sin querer, sobre
el estanque.
Regresa sobre sus pasos el leve murmullo
de una fuente.
Y la risa suave del fruto rojo del otoño
llama a la calma.
Silencios de árboles poéticos,
caducos en su timidez vegetal,
adornados de mil brazos como ramas,
son los héroes de la batalla de las estaciones.
Silencios entre silencios, es la medida…
Piedras sobre el camino y el paso lento
de quien camina.
4 comentarios sobre “Silencios entre silencios”
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Debe ser un placer caminar entre la luz y el silencio.. muy reflexivo
Bonita poesía, greko. Un silencioso pasear e3ntre la timidez de los vegetales en el otoño… una suave calma brisada por el paso lento de quien camina sobre piedras humiildes y guijarros, bajo las ramas de algún árbol ototañ de otroras frutos rojos. Una pintura de pálida luz de la tarde. en cuanto a la estructuras has puesto un ritmo suave y translúcido (si es que los ritmos pùeden ser translúcidos que yo en mi libertad vorémica considero que sí= y un final muy medido métricamente en cuanto a la expresión verbal: silencios entre silencios de quien camina con el paso lento en la medida… !Es muy bueno, Greko!. Venga… un abrazote… amigo sempiterno…
Me encanta lo sensorial del poema, es visual, es sonoro, y a la vez, lo transcendental que se adivina.
La descripción del momento silente, casi, casi, como si el tiempo se parara, te llena por completo.
“Silencios de árboles poéticos”, “los héroes de la batalla de las estaciones”, son magníficas metáforas.
Ese final en el que los pasos rompen el silencio es perfecto.
Es el silencio ideal para desconectar y sumergirse en el silencio de lo árboles.
Me calma mucho la luz tímida de tu tarde.
un beso.