Dinero. Es la medida de casi todo, o de todo. No podemos escapar de su poder, ni de su atracción fatal. Trabajo por dinero, en un curro extraño y que no tiene que ver nada con las imágenes de las películas americanas. Es un trabajo duro, constante, ausente de luz y lleno de olores a calle y ncturnidad recurrente. No he cruzado palabra con otros compañeros. Soy ese accidente silencioso que no fuma, porque no le da la gana. La noche no acaba nunca. Tiene ese desgarro eterno que la condena a ser cama de los condenados, de las putas, de los polis que pasean la gorrita y el cinturón de cuero. Dinero. habrá que ganarlo para toda la vida. Nadie vive por ti. Por eso tengo un sentido insolidario con quienes prometen la Luna a cambio de poco. Acabará el mes y se repetirá la historia. Trabajo basura. Trabajo basura el del político bufón cobrando parné y haciendo el chorra en mitad de la tele. Ese sabe que naciendo payaso paga menos impuestos. ¡Dinero! Alguna vez, en alguna esquina.
2 comentarios sobre “Trabajo de noche.”
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Saludos:
He seguido tus textos con verdadero interés. Siento mucho respeto por las personas que, aportan su verdad y su sensación de la vida. Aprecio, en lo que vale, tu valerosa confrontación con “todo ese dolor que se oculta tras tu ironia”, pero de algo estoy seguro…”la vida nunca podrá traicionarte, porque la conoces”. Gracias.
Compañero: señalas verdades muy claras y, en efecto, es importante ser insolidarioo con las bufonadas de ciertos poderosos de la impotencia dialectal. Quizás el mundo social algún día responda con la sensatez de la congruencia vital. Considero que eres una persona congruente y por eso aprecio tus textos.