En una Corte hubo un Rey y una Reina muy inmaduros y aburridos, quienes vivían allí también lo eran.
Pero había alguien deseoso de salir de tanta comodidad, deseoso de escapar de allí.
Una tarde de lluvioso y frío Domingo, fue llamado ante la Reina y el Rey:
“¡Estamos aburridos! ¡Queremos que nos cuentes un cuento!”
“¡Necesitaré una Princesa!”
“¡¿Como una princesa?!”
“¡Majestades, si busco una princesa y estudio su vida, podré hacer un cuento… muy Real… muy real¡”
“¡Cierto, no habíamos pensado en ello! Adelante. Hazlo.!”
“¡Majestades… Deberé abandonar la corte para buscar una princesa que tenga una vida original, autentica e interesante”!
Aquel secretario, pudo salir fuera de la Corte, en busca de una Princesa con una vida interesante, original y autentica. Pero como estuvo buscando la encontró, se enamoró y nunca más volvió a la corte aburrida.
Poco después recibió una paloma mensajera, y en el mensaje se le comunicaba que la Reina y el rey habían fallecido de aburrimiento, y le habían dejado sus pertenencias como herencia.
Y la Corte la convirtieron en un lugar de Encuentro y Creatividad.
Un cuento sencillo y cortito, creo ver un mensaje entre líneas, a lo mejor me equivoco.
De todas formas me ha gustado por su sencillez.
Un abrazo