Y llovía llovía… (Diario)

Y llovía llovía y la estatua permanecía muda. Y anduve observando la lluvia ácida caer sobre mi cuerpo… hasta que una luz del cielo bajó para secar todo mi cuerpo… y una voz me dijo. “Sigue más”… y seguí andando hasta la misma puerta donde bramaban los de siempre… y me sequé con la luz del sol… y llovía llovía… y una voz me dijo: “Entra ya”… y entré y todos se quedaron mudos del asombro… y llovía llovía… y una voz me dijo: “Habla ahora”. Y en ese ahora hablé y todos quedaron callados… y llovía y llovía… y los demás se quedaron en aquel lejano ayer que ya quedó seco para siempre.

2 comentarios sobre “Y llovía llovía… (Diario)”

  1. Uno en la vida no conoce a donde nos llevan los caminos, ni conocemos el efecto de nuestra personalidad en los otros, pero si hay Alguien que lo sabe y es cuando somos instrumentos Suyos, y que dicha que es así. Saludos Diesel, porque desde esVorem, se influencian tambien muchas personas por los textos y sus autores que dejan rastros de su personalidad por todas partes, y que dicha que es así. 🙂

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