Cuestión de vida

Vivimos inmersos en el laberinto emocional de un sinfín de circunstancias que, de repente, sin habernos imaginado el porqué de sus presencias, nos cambian el rumbo del vivir. Son las llamadas cuestiones de vida; las que nos empujan hasta la misma vertical del insondable Destino, esa vertical en donde no podemos hacer otra cosa, una vez llegados hasta ella, sino asirnos a la última esperanza y encomendarnos a Dios.

El caso es que nunca las buscamos con el uso de la consciencia; llegan de improviso, sin aviso previo, cuando más felices nos sentimos en el estado que pensamos ideal para nosotros. Un día cualquiera, de pronto, cuando estamos cómodamente sentados en el butacón viendo la televisión o leyendo el último libro que hemos adquirido con el deleitoso afán de saborearlo en el plácido atardecer… irrumpe la cuestión de vida y nos transtorna por completo con su zozobrante propuesta. Sigue Leyendo...

Despertar

Se quedó dormido entre el ruido de la calle y la necesidad de abandonarse al sueño. Se sentó en un rincón, en un hueco, entre cajas que ya eran inútiles para nadie. Dormir le suponía ser alguien, despojarse de la realidad y fabular en medio de la nada. Las cajas de cartón le parecieron hermosas estructuras y el suelo tan acogedor como una cama. Esta seguro de que nadie se daría cuenta, y en esta sencillez de caja y suelo…se quedó dormido.