historia no contada

Tras las flores estaba el camino que lleva a la sabiduría orgánica. La gente se agolpaba ante la puerta del museo mientras la arquitectura natural era contemplada por el viento. A Mutis le sobraban dibujantes y todos aquellos sabios quedaron ocultos por la batallas de los conquistadores y los desvaríos verbosos del realismo mágico. Mutis solo buscaba conocimiento, el que dio lugar a los jardines vacíos de los ojos atentos de las aguafuertes negras de Goya teñidas de rojo.

QUE BONITO

Que bonita es tu belleza,
que bonitos son tus ojos,
que bonita es tu proeza,
que bonito es tu rostro.

Tienes cegada a la luna,
y encandilado al sol,
con esos ojos de hermosura,
y esa voz de ruiseñor.