Miradas

Miradas perdidas que tienen hambre de amor,
amor que es difícil de encontrar como dinero en la basura.

Hay miradas perdidas que gritan ¡dame amor!
miradas que prefieren estar perdidas y sedientas.

Y tú, te haces el ciego y sordo para perderte en tus pensamientos.
Ya sentirás cuando tu mirada esté perdida.

El 41

– Oiga señor… ¿sabe usted si el autobús que va de Murcia a Las Torrres pasando por Alcantarilla pasa por la Calle Mayor
– Pues no tengo ni idea. Yo de lo que es Mayor sólo conozco a un Teniente de Cabalería conquense pero ya murió hace muchos años.

perplejo. Me quedo perpejo… pero sigo insitiendo entre las personas.

– Por favor señorita…
– No… no… yo deligues contigo no quiero saber nada…
– Pero si le doy mi palabra de hombre que no estoy inetnado ligar con usted.
– ¿De verdad?. Uff. !Qué peso me quitas de encima!. Entonces ¿qué quiees de mí guapo?. Sigue Leyendo...

En el prinicipio era Nada (2)

(Para saber cual es el desarrollo de este cuento es necesario que leas, anteriormente, la primera parte del día de ayer)

– ¿De qué color soñaremos a la Esperanza, Sombra?
– Soñemos que es de color verde.
– Verde como la rama del olivo…

Guardaron unos segundos de silencio mientras seguían caminando hacia la laguna donde Adán era visitados, todos los días, por la ave del paraíso.

– Adán, ¿te has dado cuenta de que todo lo que existe, salvo nosotros, tiene su lado opuesto?.