amor

si de algo saben
los elefantes es colgarse
de su trompa
si de algo saben los serafines
es cantar y cantar
cuando las madrugadas tienen
tu nombre grabado en
el ombligo
concibo sin sacar la
raiz secreta del amor
En el despertar del ruido
matutino de los dìas
aun espero
que nombres una palabra
que renazca la flama
del amor

!Existen las chicas!.

Nuevos tiempos. Nuevos estudios. En el pupitre de madera han dibujado un corazón grande con un apellido dentro. A su alrededor hay un numeroso grupo de pequeños corazones femeninos. Había llegado el momento de conocerlas. El momento de poder liberarlas o morir en el intento. Era la Pléyade de Cima: un grupo de chavalas guapas de cuya información no debía conocerse nada ni publicarse nada hasta que llegara un momento determinado de la vida. Ese momento ha llegado hoy. Estamos en la Cima de Madrid, en la Calle Mayor. Hace muy poco tiempo el cineasta Juan Antonio Bardem ha realizado la película “Calle Mayor” basada en la novela de Carlos Arniches titulada “La señorita de Trevélez”. Estaban todas destruídas. El famoso León de Oro las había devorado la moral… pero ya llegaban los tigres de Monpracén capitaneados por Sandokán; el heroico personaje de las novelas de Emilio Salgari. Sigue Leyendo...

Vivo en un lugar…

Nuevamente los recuerdos, los imborrables recuerdos. Un cantante de moda me trae letras. Letras para componer que vivo en un lugar donde todo es soledad. Sí. Hay húmedas paredes y los del Banco Hispano Americano ya no me dan ningún crédito. Además, la del estanco no me fía ni un real. Hablo de la barriada de Diego León. En una especie de sótano, húmedo y frío, hay que tener mucho valor para resistir los embates de la vida siempre junto a Ella. La soledad nos comunica y no une; sabemos que la humedad no va a desaparecer hasta que alguien venga y derribe el edificio de los malos sueños. Calle Viriato. Como Viriato, yo tampoco me voy a conformar. Sé que alguna vez cambiará mi suerte. El gato nos acompaña, junto a la ducle ancianita, en nuestas charlas de café junto a la humilde mesa camilla del pso de arriba. Sigue Leyendo...

Crónicas Neptunianas (Cuarta).

!Parece ya de risa esto de las tarjetas de visita, orleadas con cenefas multicolores (!vaya horterada de tarjetas!) que los “referees” (traducir por “árbitros de fútbol”) no hacen más que enseñárselas a los jugadores “colchoneros” (traducir por jugadores del Atlético de Madrid y olé) como diciendo: !Para que veáis que tarjetas de presentación tenemos nosotros los árbitros multicolores!. (!vaya horterada de camisetas las de los árbitros de fúbol de hoy en dia!). !Por eso se parten de risa desde Asenjo hasta el “Kun” Agüero pasando, por ejemplo por Simao, Reyes y Forlán más “company” (traducir por “compañía” para que se enteren los de la UEFA que cuando queremos sabemos inglés pero cuando no queremos pasamos olímpicamente del idioma inglés, como yo por ejemplo). Sigue Leyendo...

La real y verdadera historia de la Copa Fiocchi y la Princesa (al detalle) Diari

Equipos Participantes:

CJ.- Español y Betis.
CG.- Zaragoza y Atlético de Bilbao
CB.- Mallorca y Elche
CM.- Atlético de Madrid y Barcelona.

De cómo sucedieron los hechos:

Pues resulta que eran tiempos de adolescencia y ya se sabe que en tiempos de adolescencia todos los hombres de verdad tenemos un poco o un mucho de infantiles y un poco o un mucho de adultos (salvo algunos casos “anormales” y lo digo en el buen sentido de “fuera de lo normal” que no son ni una cosa ni otra).

Midnigth III

Ella no puede tener más tiempo en su habitación a ese minino, se ausenta constantemente y la beca no alcanza para cubrir un veterinario, tantas cosas que aquí no se dirán porque no se quiere excusar a nadie, no hace falta. Dedica ese día a buscarle un hogar mostrando las fotos en su celular, pero a nadie le gustan los gatos y menos los negros.

“… si fuera un perrito puede ser”

“no,no, si yo lo que quiero es deshacerme del que tengo”

“no, esos son una peste, por mi casa hay varios y no los quiero”

Midnigth IV

Los dos días siguientes fueron las mismas rutinas de los días anteriores, sin embargo Midnigth superaba la infección que tenía en los ojos y por la estricta dieta de té, leche y galletas dietéticas la diarrea había cedido un poco, sin embargo aquel tono opaco no abandonaba los ojos del animalito.

Cada mañana era lo mismo para ella, pues repetía el ritual de limpieza; a pesar de ello todo indicaba que ella decidiría quedarse con Midnigth, aunque se veía tentada a dejarlo en el jardín de la universidad; pero sus temores superaban esos pensamientos, pues sentía que de dejarlo solo, este no sobreviviría. Sigue Leyendo...