Midnigth III

Ella no puede tener más tiempo en su habitación a ese minino, se ausenta constantemente y la beca no alcanza para cubrir un veterinario, tantas cosas que aquí no se dirán porque no se quiere excusar a nadie, no hace falta. Dedica ese día a buscarle un hogar mostrando las fotos en su celular, pero a nadie le gustan los gatos y menos los negros.

“… si fuera un perrito puede ser”

“no,no, si yo lo que quiero es deshacerme del que tengo”

“no, esos son una peste, por mi casa hay varios y no los quiero”

“no tengo tiempo pa’ estar cuidando un animal de esos”

“esos bichos son sucios, mas bien dejalo por ahí”

“y… por qué no te quedas tu con ese gato?”

“da miedo, ese bicho si es feo”

“a mi no me gustan los gatos y menos negros”

Ella no quizo ponerle nombre al minino pues no lo consideraba suyo, solo quería salvarlo y aunque nadie lo aceptaba como mascota; ni siquiera ella; no estaba en su naturaleza deshacerse de las cosas que le estorbaban de algún modo.

Finalmente se encontró con su amiga, y esta le pregunto cómo se llamaba el gatito, ella respondió la amiga era extranjera igual que ella pero de donde venía hablaban inglés, así que se oía mejor en este idioma el nombre que en su corazón le puso desde que lo conoció… Medianoche

Afortunadamente Midnigth estuvo a salvo en la casa de la vecina, ella lo recogió puntualmente y se lo llevó a su casa; no sin antes limpiar las gracias del pequeño en el patio

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