Mi perra no es una perra,
es mi cielo, es mi mar.
Mi perra no es una perra,
es un ser excepcional.
Mi perra no es una perra,
es un trozo de bondad,
que me llena de alegría
y me quiere de verdad.
( Dedicado a mi perrita KISS )
Vamos por los caminos férreos de las vías del tren de Arganda. Divisamos el puente sobre el abismo (algo así como El puente sobre el río Kwai pero en versión española-madrileña). Somos E, J, B y M. ¿Es esta la serie correlativa para Almudena?. Si estuviésemos hablando de historias de cementerio, de muertos y de sangre, como nos cuenta él, por supuesto que sí pero… ¡mira por dónde!… estamos hablando de la vida y del saber vivir y en este caso… por mucho que se empeñe hasta las cejas en impedirlo… el orden es otro bien distinto.