Dejando a un lado a las chicas (por eso de que son damas y a las damas hay que tratarlas con cariñosa amistad) yo no sé por qué hay tantos hombres que se avergüenzan de cómo se llaman. No hay que tener ninguna clase de complejo por los nombres que nos han puesto nuestros padres. En realidad tan santo es Tiburcio como Agustín. ¿Y qué decir de Leoncio? ¿Es normal tener complejo por llamarse Leoncio? Entre mis recuerdos sobre dibujos animados me vienen a la memoria, ahora, las escenas de Leoncio y Tristón. ¿Tenían complejos Leoncio y Tristón porque les pusieron esos nombres? Quizás Tristón sí los tuviera y de ahí su sempiterno pesimismo, pero Leoncio, a pesar de llamarse Leoncio, era tan optimista que veía la vida en positivo. Recuerdos. Recuerdos de adolescencia.