Rockefeller podía poner su firma en un papel y darle el valor de un millón de dólares. Esto se llama “capital”. Picasso podía tomar un trozo de tela de cinco dólares, pintar un cuadro encima y darle el valor de cincuenta mil dólares. Esto se llama “arte”. Borges podía tomar una hoja de papel, escribir sobre ella y darle el valor de seis mil dólares. Esto se llama “genio”.
Dios puede tomar tu vida, que está destruída, angustiada, herida, sin valor, y transformarla en una vida plena, abundante, feliz, una vida que valga la pena ser vivida. Esto se llama “salvación”.
Revista UNO (periódico mensual cristiano). Año II número 20 octubre 2009.