Corre en tu piel desnuda
el sueño que martiriza.
Esperas la noche muda
de penumbras y cenizas
Hay un coro de íncubos
que tu soledad utiliza
para pintar prostíbulos
en mentes que agonizan
Rehúyes, acosado
por sus burlas y rechiflas
del último bastión alado
que tu verbo satiriza
¿Qué ha sido de la voz melliza?
Preguntas, aturdido en tu quebranto.
Buscas, en la piel que hechiza
el volumen de tu canto
Y es que no sabes
de la verdad clara y bendita
de un amor cansado y suave
sobre espumas infinitas.
Adriel Gómez Mesa
Febrero 2010
Sí, eso es lo que digo… Somos vacúos, somos polvo…
A veces la ceniza sirve para enseñarnos que la vida de algunas personas sólo es polvo… jejejeje…. un abrazo…