Venus de julio,
¿a qué tú vienes?
-Te traigo el alba
que tu alma quiere,
la que su boca
niega la tuya
cuando tus ojos
desdicha exhiben,
y angustia
sientes-
Golondrinas moribundas
acompañan las cenizas
de mi genio, mi destino
y mis quereres.
Ébano cincelado
del Rey de Reyes,
regálame un beso
de anís y mieles,
dulces notas
que en mi lápida,
eternamente,
marcadas queden.
Amigo Txiki, cómo extrañaba tus poemas. Volver a ver que escribes de nuevo me alegra. Espero que sigas publicando cómo antaño. Tus versos son transparentes y muy líricos.
Gracias compañero.
Hola Txiqui. Una vez conocí a un ser querido al que llamaba Chiqui. Sí. Es cierto que Txiqui no es lo mismo que Chiqui pero son sentimientos al fin y al cabo. Tu poema me gustó porque trata de ese caprichoso devenir de los poetas. Poeta, al fin y al cabo, es saber sentir. Un abrazo cordial y bienvenido de nuevo a la Luz.