CARLOTA

Carlota llegó a mi casa de una forma un tanto peculiar, todo comenzó en el patio del instituto de mi hija Samara donde una gata se puso de parto justo a la hora del recreo, y creedme amigos que no me puedo explicar el comportamiento que tuvieron esos niños de 13 y 14 años con una gata recién parida y sus gatitos.
Se liaron a patadas y salvajadas hasta tal punto que mataron a la madre y a casi todos los gatitos .Mi hija y dos amigas rescataron a los dos gatos supervivientes aunque estaban en muy mal estado y se lo llevaron a un veterinario que hay en la calle Antonio López, alli se comprometieron a intentar salvarlas la vida pues se trataba de dos hembras, pero con una condición, cuando estuvieran curadas tenían que responsabilizarse de los animales.

Mi hija es asmática y le tengo prohibido tener animales en casa, aunque teníamos una coballa, a mi de pequeña no me dejaban tener animales y me parece muy importante tener una mascota a la que cuidar.
Vivo en la planta baja de unas casas que hay en usera que se hicieron antes de la guerra civil y tenemos patio, el alcantarillado es muy antiguo y las vecinas me han comentado que mas de una vez se les ha colado una rata de esas gordas por el bucillo, yo las tengo pánico, pues bien.
Me disponía a abrir el cesto de mimbre de la ropa sucia, cuando oí dentro un ruido muy parecido al que hace mi coballa, lo primero que pensé fue, Samara ha metido la coballa en la cesta de mimbre, pero veloz fui a la jaula para ver si estaba el animalito y efectivamente allí estaba tan pancha mi coballa, “date ya se me ha colado una rata”, no sabia que hacer el pánico era tremendo, Alicia relájate y piensa, estuve cerca de una hora haciendo una trinchera o especie de camino para que saliera al patio y se fuera, es obvio que no me atrevía ni acercarme, por fin me hinché de valor y armada con escoba, martillo y cuchillo, abrí la tapa del cesto y que me encontré, un diminuto gatito, que había traído Samara de extranjis, otro problema mi marido odiaba los gatos, (si le vieran ahora).Es la reina de la casa, junto con mi tortuga Casiopea oriunda del río Cachón en Zahara de los atunes, por cierto esta en extinción no escomo las de las manchhitas rojas que son canibales y acaban con nuestro ecosistema, si alguno de vosotros tiene jardin con fuente o pequeño arroyo y la va a cuidar muy bien yo se la regalo, con derecho a visitas, un besazo voremios

3 comentarios sobre “CARLOTA”

  1. Alicia,

    Es absolútamente terrible la actuación de esos niños de 13-14 años ante una gatita parida y los gatitos recién nacidos. No quiero pensar como esos niños adultos actuarían ante otras personas, porque me viene a la mente el holocausto nazi. A esos niños deberían sentarlos ante esas imágenes terribles para que no vuelvan a repertir una actuación tan deshumanizada.

    Por otro lado, felicito como se comportó tu hija y su amiga, y felicito a la madre por los buenos valores que le estás inculcando.

    Me alegro que la gatita tenga ahora una vida feliz en vuestra compañia.

    Finalmente, tu tortuga Casiopea, si es una tortuga de una especie protegida en peligro de extinción, no debería estar en una casa, pues no es la manera correcta de protegerla por muy buenas intenciones que tengáis. Te sugiero que la lleves a algún centro para especies protegidas donde la cuidarán correctamente.

    Un saludo

  2. La acción de esos niños salvajes fue brutal y da verdadero terror pensar lo que pueden hacer cuando tengan un par de años más. En cuanto a los gatitos es de gran humanidad lo que hicieron tu hija y sus amigas. Me alegra saber que todos en tu casa amáis a la gatita que habéis dado cobijo. Yo tuve un gato en mi casa llamado Pirracas y durante años fue algo increíble los sentimientos que me despertó en mi infancia. Pirracas fue elemento primordial para que desde siempre yo tenga un gran cariño y amor hacia los animales. Quizás el caso de tu tortuga en peligro de extinción sea para estudiarlo porque la opción de Only parece razonable pero eso depende de cómo veáis en vuestro hogar el asunto. Lo que está claro es que lo que habéis hecho con la gatita es de seres humanos en su totalidad. Un besote, Alicia.

  3. Pues a mí nunca me habían gustado los gatos. Ellos en su lugar y yo en el mío, desde muy pequeña, influencia de mi padre a quien se le tiró una de la vecina y le puso como un Ecce-homo.
    Hace tres veranos estaba yo muy temprado preparándome el desayuno y oí un maullido en el patio-jardín de mi comunidad. Miré por la ventana y ví un gatito muy pequeño al que atacaba otro grande. No me lo pensé dos veces, bajé, cogí al gatito y me lo subí a casa. Cabía en la palma de mi mano. Entré en la habitación de mi hija, que estaba durmiendo y se lo enseñé. Como es una obsesa de los animales, se puso muy contenta. Yo dije que era para colocarle, lo bajé al veterinario en cuanto abrió la consulta y lo coloqué… Vaya si lo coloqué. Ya lleva tres años en casa. Es un gato mimoso pero malo, porque cuando quiere atraer nuestra atención, muerdes. Pero qué se le va a hacer. Es mi gato y le quiero mucho.

    Por cierto, Diesel, se llama Pirracas también, como el gato de Celia.

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