Emoción

¡Si!, ¡Dame el sol! ¿Donde firmo para que sean mías las estrellas? ¡Sigue! otórgame los mares y la grandeza de la tierra… ¡Adoro tu emoción!, esa luz en tus ojos que todo alcanza y penetra, esas manos que tiemblan y buscan mi equilibrio, el momento justo, el instante exacto: Tú. Poseído por ese demonio brillante que te hace danzar como arlequín, logras que tu risa me eleve al cielo, cuanta alegría expresas, tantas cosas que quieres entregarme, cuantos besos quieres robarte, tantos abrazos que me atrapan, osas levantarme y no soy cometa, pero siento que floto en el aire… Esa emoción tan tuya, tan merecida, momentos de triunfos, y… Solo sonrío, sé que nada debo creerte ni sentir que me pertenece, porque te irás, y regresarás circunspecto y callado, perfeccionista y ecuánime, serás de nuevo el de siempre y esta será otra historia, y entonces me guardaré el secreto una vez mas, esperaré paciente la siguiente emoción, la siguiente descarga de energía, la siguiente locura que me renueve el alma… y la vida.

3 comentarios sobre “Emoción”

  1. !Olé y olé, dinora!. !Chapeau!. Me encantó eso de la siguiente locura que reneuva el alma… y la vida. No somos cometas y sin embargo flotamos por el aire. Para los realistas “sanchopanzas” eso es imposible… para los otros (los voremios) eso es tan real como sentir la emoción de la luz en nuestros ojos. !Muy profundo y bonito a la vez, dinora!.

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