Existe un lugar en donde todo comienza después de la Muerte y está lleno de Vida. No hablo de una hipótesis futurista, así que no me estoy refiriendo a lo que pueda o no pueda haber en el “más allá”. Ese lugar está concentrado profundamente en el “acá”. No es infinito y por lo tanto nada tiene que ver con la hipotética eternidad. A ese lugar se le da categoría de Tiempo pero yo opino, después de meditar un cierto tiempo a través de la experiencia personal, que ese lugar debería ser categorizado dentro del sistema de lo intemporal… porque ese lugar se llama Hoy. Ese lugar comienza después de la Muerte es el único en que verdaderamente podemos decir que estamos con vida plena. Hoy. Este mismo instante. Este mismo minuto en que estás leyendo, o pensando, o cometiendo un acto cotidiano lleno de sensualidad vital, o simplemente estás pasando de puntilla por la levedad de lo estático.
Quizás en ese lugar, en ese Hoy, en ese instante estés formando toda una serie de inquietudes profundas sobre el devenir de tus cosas. Quizás solamente estés comiendo una manzana por el simple placer de sentirla. Quizás en este Hoy no estés comprometido con nada impactante o quizás en este Hoy te hayas incursionado en un proyecto verdaderamente entusiasta. Puede ser que en este Hoy no estés haciendo absolutamente nada o estés haciéndolo todo o al menos todo lo que has deseado hacer durante largo tiempo. No lo sé. Nadie puede saber lo que significa este lugar para cualquier otro ser humano… pero de lo que estoy seguro es de que este lugar-tiempo-espacio llamado Hoy es lo único que verdaderamente podemos catalogar como Existencia. Lo otro, lo de los infinitos, lo de las eternidades con sus cielos y sus infiernos, lo de los posibles o no posibles mundos del “más allá” deduzco que son hipótesis más o menos relativas o más o menos absolutas según el pensamiento de cada ser humano. Lo cierto. Lo que no es ni relativo ni absoluto porque pertenece simplemente a la vida es este lugar llamado Hoy. La verdadera síntesis de lo que llamamos vivencia.
6 comentarios sobre “Este lugar llamado Hoy”
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Me encanta el comienzo de la reflexión. “Existe un lugar despues de la muerte y esta lleno de vida”, ese Hoy que nombras, incluso el ahora que es más de lo que hubo ni habrá nunca, en este mismo instante.
Pienso que cada ahora es lo mismo que cada otro ahora. Tan solo una consciencia como la humana puede darle interpretación, simbologia a todos los ahoras creando así la idea del tiempo, pero es solo eso, algo humano, nada más.
Un abrazo
Amigo Diesel, tal como yo lo entiendo, es en ese Hoy donde sentimos la certidumbre de existir. No sé si es un estado intemporal, porque la conciencia de ser parece estar siempre asociada a una proyección hacia el porvenir, como si nuestra naturaleza no admitiera el quedar atrapada en una definición definitiva.
En cualquier caso ¡qué raras veces podemos escribir nuestro hoy con mayúsculas!
Un abrazo
…Coincidimos, estimado Diesel. El verdadero sentido del Todo es un Hoy Polivante. Mediatizados por un tiempo cortado, parcial e incluso “inventado”, hacemos de nuestras experiencia un comienzo y un fin…Morir tiene ese sentido de lo “temporal”, donde un Hoy es un “Hoy”, y el mañana se entrelaza con un profundo devenir hacia otro Hoy. Saludos. Una excelente reflexión.
Enlazo con tu comentario, compañero. El Hoy de cada día no tiene ningún sentido de manera aislada (algo que se demuestra imposible de vivir) porque está concatenado al Hoy ya vivido (ayer) y al Hoy por vivir (mañana). Efectivamente yo me refiero al Hoy proyectado que es resultado de las causas y las consecuencias. pero de eso hablaré con más claridad en un próximo texto.
Hola. He sentido muchas veces esa inquietud de pode redefinir la existencia a través de la vivencia de cada Hoy. Tu texto, Diesel, así como los comentarios adjuntos de Grekosay y de tí mismo, son de una gran claridad expositiva y estoy de acuerdo en la totalidad de la exposición. Añadiría solamente que esa manera de entender la vida va mucho más allá que el de la simple observación fiolosófica porque está llena de plena acción vital. Un beso.
Amigo Diesel, tal como yo lo entiendo, es en ese Hoy donde sentimos la certidumbre de existir. No sé si es un estado intemporal, porque la conciencia de ser parece estar siempre asociada a una proyección hacia el porvenir, como si nuestra naturaleza no admitiera el quedar atrapada en una definición definitiva.
En cualquier caso ¡qué raras veces podemos escribir nuestro hoy con mayúsculas!
Un abrazo