Enhiesto sueño vertical de las columnas azules, fúlgida grandeza entre la tierra y el cielo, sobre la escarpada roca de tu historia el dulce fluido verde, bañado por el sol, regresa al sonoro pecho y un ocio cerrado, como de siesta crecida bajo el claro silencio, me hace extensas las pupilas. En torno mío una piel que es caricia, tacto, signatura de lo amante, se amansa bajo el álamo y los sauces.
Como ruiseñor nocturno, como fértil olor avivado por el néctar de las flores, reposo entre el enjambre de la tierra y su espesura. Al fondo de esta naturaleza viva, un soplo de armonía transmuta mis arterias íntimas en una corriente que primero se agita y luego calla para mecer al alma.
Por el pulso universal de los albores de la luna la consciencia, en un instante, se convierte en pensamiento de glaucas claridades y en el seno espacioso de los brazos turgentes de este ensueño me hago solidario del milagro germinal de la mañana.
Amigo, sientes el milagro germinal de la mañana, de la luna, de todo lo fisico y de todos los pensamientos que se pelean en tu interior para transmitirte, cada palabra un paso mas,hacia la belleza natural de la verdad.
Un besazo, saca diluido el universo en tu piedra filosofal. Lo tienes